La ex diputada nacional por Cambiemos y líder nacional del Partido Demócrata Progresista, profesora Ana Copes, mostró su apoyo a la decisión del gobernador de Santa Fe, Miguel Lifschitz, para la instauración del juicio por jurados en la provincia. La legisladora subrayó que la unanimidad como requisito para la existencia de veredictos -a cargo de ciudadanos que asumen las funciones de jueces- es vital para que haya rigor en el análisis de las causas. “Tuvimos la gran oportunidad de escuchar a dos expertos estadounidenses que visitaron nuestra provincia para hablar del juicio por jurados”, comentó Copes respecto de las conferencias de John Gastil y Shari Diamond, en Rosario, acerca del tema de la unanimidad de la sentencia, lo cual es un “temor infundado” dijo.
Mandato de 1853
“El juicio por jurados es un viejo mandato desoído de nuestra Constitución Nacional. Desde los inicios, nuestros constituyentes señalaban al jurado popular como el sistema de juzgamiento propio de una República”, recordó la ex concejal de la ciudad demoprogresista y agregó que “en los últimos años varias provincias del país han iniciado sus procesos de discusión por la instauración de jurados populares; al impulso de Neuquén le siguió la provincia de Buenos Aires, Córdoba luego Chaco y Río Negro”, aunque estas dos últimas todavía no han implementado el sistema. “La importancia del jurado popular, compuesto únicamente por ciudadanos, es vital para recomponer la confianza de la ciudadanía en la Justicia. Hace meses -junio del año pasado-, el gobernador envió a la Legislatura provincial el proyecto para instalar los juicios por jurados en Santa Fe. Hemos celebrado sinceramente esta decisión del gobernador y brindado todo nuestro apoyo a la iniciativa y al debate”, expresó en el diario El Litoral.
Pregunta central
Tal como ocurrió con la reforma del Código Procesal Penal en la provincia, Copes anticipó que el debate hará que “proliferen dudas, temores y resistencias frente a un nuevo sistema de enjuiciamiento que pretende instalarse al interior de otro que lleva años trabajando de una misma manera”.
Aseguró que “las experiencias de juicios bonaerenses y neuquinos han colaborado en desmitificar muchos de estos temores: los jurados son capaces de arribar a veredictos ajustados a derecho; son sensatos en sus decisiones, no juzgan por sus emociones sino por la prueba que se presenta en el juicio; no son permeables a artilugios de las partes o influencias de los medios de comunicación, y no tienen ni más ni menos prejuicios que los propios jueces profesionales”. “Quizás la resistencia más evidente en la discusión por la instauración de los jurados es la respuesta a una pregunta central: ¿Cómo decide el jurado? ¿Por mayoría especial o por unanimidad? Existe un temor muy grande a la unanimidad como requisito para arribar a un veredicto. Podemos ciertamente imaginar a qué se debe este temor, porque no existe experiencia semejante en nuestra democracia. Menos aún los representantes políticos que acostumbramos a tomar nuestras decisiones en general por mayorías. La posibilidad del consenso, de la decisión unánime, nos asusta porque centralmente la experimentamos muy pocas veces en nuestra democracia. Sin embargo, la unanimidad es posible”, señaló.
Los jurados integrados por ciudadanos, en el mundo, “llegan a la unanimidad todos los días; sin duda alguna, es el resultado del ejercicio democrático por excelencia: la deliberación. Deliberar implica discutir con otros nuestros puntos de vista, implica revisar puntos divergentes hasta alcanzar acuerdos”. “Cuando optamos por la regla de la unanimidad estamos diciéndole al jurado que debe deliberar profundamente sobre la prueba, que debe poder escuchar a todos los integrantes del jurado, que debe atender a las diferencias, que deben lograr un consenso, siempre que éste sea posible. No hay ningún modelo que respete más el disenso que la unanimidad”, expresó. La unanimidad “previene que la mayoría decida no escuchar a las minorías en el jurado, y, del mismo modo, evita que las minorías resuelvan por sí mismas. El único modo de garantizar deliberaciones profundas es a partir de esa exigencia”.
Es tiempo de la gente
“Es tiempo que le devolvamos a la ciudadanía el poder de juzgar, que por más de 150 años le hemos vedado”, afirmó la esperancina Copes.
Justicialista
Mientras tanto, el diputado justicialista Julio Eggiman, muy conocido por su ley del deporte que rige desde hace 25 años en la provincia de Santa Fe y su paso como funcionario del gobierno de Carlos Reutemann, visitó nuestra ciudad donde fue entrevistado por El Colono del Oeste.
“Es una iniciativa que quiero que se plasme en Santa Fe” dijo taxativamente acerca del juicio por jurados populares que se encuentra a debate en la Cámara de Diputados.
“Tiene el antecedente excelente de su funionamiento en otras provincias argentinas y es una herramienta que democratiza a la Justicia” aseveró el legislador peronista.
Dijo que es importante el juicio popular en casos de homicidio, abuso sexual, violencia de género y en casos de corrupción de funcionarios públicos.
Eggimann se entrevistó con dirigentes peronistas locales y además estuvo en el Palacio Gris donde mantuvo una reunión con la intendente Ana María Meiners (PJ) e integrantes de su gabinete para tratar temas de la ciudad.