Los 90 años de Alma Juniors fueron el inicio de otro proyecto extraordinario e impactante. En su sede se desarrolló el festejo cargado de emociones con historias de dirigentes y deportistas que hacen al club y a Esperanza. Para el final, sus autoridades presentaron el nuevo Polideportivo. La numerosa asistencia quedó maravillada.
Alma Juniors celebró sus 90 años en la noche del viernes. Una noche de emociones que terminó con el inicio de un gran sueño de obras extraordinarias en el Polideportivo que fue presentado ante la masiva concurrencia a la sede de la entidad.
La noche abrió con emociones múltiples cuando Oscar Soldavini y Juan Carlos Chiconi, cantaron la marcha del club. Soldavini que comenzó a jugar en el Club a los 10 años, contó que era la úlitma vez que cantaba en público y cerró su carrera como cantante popular y Chiconi derrochó sentimientos dado que él la cantó por primera vez, hace 70 años, en la Sociedad de Canto.
La ex presidenta e intendente de la ciudad Ana Meiners dijo que “las causalidades de la vida me hizo presidenta de Alma Junors y hoy intendenta de la ciudad. Dos hechos inimaginados cuando era muy niña y venia desde mi casa en la ruta, con los hermanos Romero, en bicicleta a jugar al básquetbol”.
Posteriormente resaltó a ese grupo de dirigentes visionarios que “visitamos al Club San Jorge y al Club de Amigos de Capital Federal para pensar un nuevo club proyectado”. Historió entonces la compra del predio y el desarrollo del Polideportivo así como resaltó la importancia de la creación de la Mutual. Trajo a la memoria a los dirigentes que hoy son parte de la historia y citó a Noemí Vernazza como a otros dirigentes y colaboradores que nos miran desde los alto.
Tuvo memoria para citar a los bailes extraordinarios con las orquestas de Varela Valerita o Los Cinco Latinos. Y con una sonrisa citó, a los jóvenes que un día se encontraron en el club y formaron noviazo y matrimonio. Y terminó con un deseohermoso : “Alma Juniors nos vemos para el festejo de los 100 años”.
Tras recibir una placa del municipio, el presidente de Alma, el doctor Alejandro Marcuzzi habló de sus 35 años en el Club y señaló el presente de la entidad, venturoso, tras haber soportado en el país tiempos difíciles desde lo social, lo económico y lo político “sin embargo a todo lo hemos superado y nos hemos fortalecido” sentenció.
Tras un reseña de los logros, valoró como determinante la creación de la Mutual para el desarrollo institucional, deportivo y social.
A los jóvenes deportistas de todas las disciplinas presentes y a los abnaderados deportistas llamó al sentido de pertenencia, a amar su club “porque ustredes son Alma Juniors” les sentenció.
Tuvo palabras emotivas para los “dirigentes de barrio, los piioneros, gente trabajadora, comprometida pero por sobre todo, buena gente” aseveró. Y dijo que por sobre todas las cosas, más allá de la ropa que vistan sus deportistas, la camiseta blanca y negra se lleva en el corazón. “Sean ustedes mejores personas para ser mejores deportistas” manifestó en su convocatoria a los deportistas de la entidad.
Asimismo, el arquitecto Eduardo Schmittendorf, presidente de la Mutual dijo que la historia de hoy está presente a partir del pasado y llamó “visionarios” a los dirigentes que crearon al club y a la mutual. Destacó el apoyo desde siempre de la comunidad esperancina al club y a la mutual, pero tras reseñar valores humanos, nombres y obras, dijo que “lo mejor está por venir”.
Fue en esa instancia en que se presentó un video institucional con las extraordinarias obras para realizar en el Polideportivo, que dejaron impactados a todos los presentes.
En el marco del acto la diputada provincial Jimena Senn entregó una distinción de la Cámara de Diputados para el club y además fueron nombrados dirigentes, entrenadores, socios y deportistas como socios vitalicios en un importante número.
Hay que destacar la impecable actuación de la Banda de música Municipal dirigida por el Maestro Marcelo Husser.
Resta indicar la presencia de concejales de la ciudad, funcionarios municipales y en especial la familia de Alma.