La álgida discusión con dimes y diretes que tuvo esta obra, con la ciudadanía dividida y la oposición exigiendo distintas prioridades, más los debates ácidos que se generaron en el Concejo Municipal, hizo que finalmente el gobierno municipal desistiera de su realización.
La propia Ana Meiners lo informó a la prensa local y dijo que se perdió el dinero de Naciones Unidas para la obra y que este fracaso es producto “de la mezquindad política”, acusando a los partidos de la oposición por la misma.
“La obra de la Ciclovía no se hará” manifestó la Intendente Meiners de manera categórica, lo que le pone punto final al tema y nunca se sabrá qué resultado hubiera tenido para la seguridad y el tránsito en la comunidad en una zona que es peligrosa de transitar especialmente para motos y bicicletas.