Patricia Mansilla, directora del Instituto “Almirante Brown” de nuestra ciudad calificó como “inédita y emotiva” la clase abierta organizada por el centro de estudiantes de la entidad educativa que cuenta con 400 alumnos de Esperanza y comunidades de la región.
El pedido de los alumnos es para poder contar con un edificio propio.
Mientras el gobierno provincial calificó como “un acto de amor hecho por jóvenes que muestran pertenencia al Instituto” recordó que la entidad tiene contrato hasta el 2023 para funcionar en el Colegio San José.
Mansilla valorizó tal calificación pero advirtió que “un año y medio es poco tiempo. A iniciativa del concejal Rodrigo Muller, el concejo municipal pidió al gobierno de Ana Meiners los terrenos disponibles con que cuenta el municipio para ser uno donado a la provincia.
El gobierno en el año 2020 mandó la lista con esos terrenos al gobierno santafesino y se está a la espera de que las autoridades del Ministerio de Educación lleguen a la ciudad para verlos y elegirlo, para luego efectuarse la donación y el trámite de aceptación por parte del gobierno nacional. “Y eso leva su tiempo” dijo.
También en se conoce que el gobierno santafesino realiza las gestiones para conseguir el dinero para construir el edificio, el cual debe salir de las arcas nacionales. “Eso también lleva su tiempo” explicó la Directora.
Y cuando se tenga el terreno, el dinero, los planos hechos hay que llamar a licitación. Para posteriormente construir el edificio. Y estos son los fundamentos de Mansilla para señalar que “un año y medio es poco tiempo”.
Cabe señalar asimismo que el Instituto tiene en nuestra ciudad 400 alumnos, que el año pasado se inscribieron 110 alumnos en primer año y que este año, a pesar de la pandemia son 100 más los jóvenes que eligieron el Brown y nuestra ciudad para estudiar su carrera terciaria.
“Ayer -por el miércoles- se recibieron dos alumnas, tras cuatro años de estudios. Estamos muy felices porque significa para las autoridades y los docentes: trabajo cumplido” señala la Directora y se le ilumina toda la cara con una sonrisa.
Pero no son tiempos de muchas alegrías. Cuenta que “lamentablemente esto de la pandemia nos ha hecho daño. Hay muchos estudiantes del último año que deben materias.
La gente está más pobre de dinero este año, más incluso que el año pasado y a muchos alumnos se les hace imposible tener un teléfono y adherirse al sistema no presencial. Es muy triste ver a tantos chicos y chicas que no pueden estudiar por no tener un teléfono o no poder pagar internet. Más cuando son estudiantes que cursan el último año y necesitan el título para poder trabajar” dice con dolor la profesora Mansilla, que tiene aquilatada experiencia en materia de enseñanza.
En este punto hay que citar que es de una enorme ayuda el sistema de boleto educativo gratuito que ha impuesto el gobierno provincial, pero desgraciadamente las clases presenciales prácticamente no existieron hasta la fecha por el Covid.
Hay que citar que la comunidad educativa reconoce que se trabaja por el objetivo común desde el gobierno santafesino, en conjunto con el Concejo Municipal y el Gobierno de la Ciudad sumados a las autoridades del Instituto Anexo, pero entienden que será necesario alcanzar celeridad en los trámites para no padecer en el año 2023.
En ese punto “emociona ver a los alumnos comprometidos con la entidad y con sus compañeros de mañana. Es un acto de amor hermoso lo que hicieron en cuanto a la clase pública en Plaza San Martín y los acompañamos lo mejor que pudimos y de como nos dejaron” dice la profesora Mansilla.