La Dra Fabiana Pennacchio, médica del sector Covid del SAMCo y del Sanatorio Esperanza escribió una dramática cata abierta a los vecinos de Esperanza. Hay que recordar que el miércoles 12 de mayo venidero es el Día de la Enfermera.
«Quiero contarles que estamos preocupados, porque la situación del Covid está cada vez más difícil por más que luchamos cada día.
Nos ponemos el equipo, las máscaras, y toda la fuerza para atender a todos.
Entre papeles, termómetros, oxímetros, hisopos, alcohol, historias clínicas, radiografías, sueros, oxígeno, evaluamos si vas a ser un paciente leve, si te vas a complicar con neumonía bilateral, y llega una ambulancia con un paciente que neprecisa nternación.
Comenzamos la incertidumbre, a dónde podés quedarte, mientras miramos por la ventana y vemos colas de gente con ansiedad y miedo.
Algunos entran y se les nota la angustia, se desvanecen y corremos para que no se golpee. Te damos ánimo tratamos de contenerte, te medicamos para aliviar los síntomas.
Alguno del equipo tira una broma y seguimos con el que trajo un análisis o radiografía para control, con la foto de tu historia para cargarlo en el sistema, y así pasaron cuatro horas o más sin beber un vaso de agua, porque para eso tenemos que descambiarnos y no hay tiempo.
Ya no hay tiempo, a veces camas tampoco, a veces hay un solo médico con su enfermero para todos, y son muchos porque somos centro de derivación.
Por la derivación, a veces tenemos que decirles a nuestros colegas de un pueblo, »evalualo», no hay lugar, sabiendo que está haciendo todo lo posible para no tener que mandarlo, pero la neumonía se complicó.
Y escuchamos todavía algún incrédulo que minimiza la situación porque tuvo la suerte de que no sufrió una internación en terapia, no dejo un familiar sin poder verlo ni cuidarlo, no le tocó esperar por horas un parte médico durante semanas, y lo mejor aún, no perdió un ser querido sin poder despedirlo.
Esta segunda ola no respeta grandes ni chicos, se comporta como quiere, como un resfrío o gripe leve, o con neumonías con trombosis, con pacientes jóvenes que vuelven a sus casas con oxígeno para poder dejar la cama a otro que recién empezó.
En internación todo el equipo de salud los cuida, los medican, limpian. alimentan, y acercan lo que los familiares le llevan, y lo hacen de corazón.
Porque estamos dejando todo, hasta donde podemos, pero necesitamos de ustedes también. Que se cuiden, que sacrifiquen un fin de semana, una reunión, una peña, necesitamos tu ayuda, porque nuestras familias también nos necesitan sanos, de cuerpo y mente.
Nosotros también estamos cansados, y queremos volver a la normalidad. También queremos que sigan las clases, los negocios sin restricciones, los bares, los deportes, los viajes, etcétera.
No sos el único perjudicado, hay un planeta que está sufriendo. Por favor, si podés, quedate en casa».
Lo que dice la gente de Esperanza
Daniela. Debieran poner a todos los incrédulos, vestirlos y llevarlos a trabajar a los sanatorios y hospitales, a recorrer, a ver que realmente es fea la mano. todo esta colapsado y ni asi se dan cuenta que esto es serio. Quedate en tu casa.
Viviana Edith. Gracias mil veces por todo lo que hacen. Disculpas por todos aquellos que no tienen siquiera un poco de empatía por todo lo que estamos viviendo, por el sacrificio de los profesionales de la salud. Ruego para que esta pandemia termine pronto. Cuidate mucho.
Norma.Gracias por todo el equipo que trabaja sin descansar. Estamos pasando un momento muy complicado. Oramos por todos los trabajadores de salud y por favor ,que la gente tome conciencia que esto no es broma, es real .Gracias, gracias,gracias.
Lidia. Tenés mucha razón en lo que expresas. Qué lástima que todavía hay gente que no entiende o no quiere entender. Los admiro a todos ustedes que hacen lo imposible por los enfermos. Y hay cada vez más bendiciones para todos quienes están en mis oraciones.
Mabel. Me pongo de pie y aplaudo y respeto todo el esfuerzo que hacen querida amiga. Ojalá todos entendieran la gravedad de la situación. Una vez más mi respeto y reconocimiento.
Romina.Dios te bendiga Fabi a vos y a todo el personal que deja hasta la vida por todos.
María del Carmen. Mi respeto y admiración a todos. A tí, querida Fabiana, siempre luchando por tus semejantes. Tu profesión es la caridad de Cristo, que nos la enseñó. Y hoy más que nunca, ustedes, los profesionales de la salud la están viviendo.
Nelida. Fuerza Fabi. Que Dios sabrá recompensar todo ese trabajo y más, Dios los llene a bendiciones a todos los médicos, enfermeras y personal del Hospital de Esperanza y de los sanatorios.
Silvia. Querida primita cuanto te admiro . ¡No sabés las ganas que tengo de darte un fuerte abrazo!
Ester Guadalupe. Que Dios Bendiga y cuide a todo el personal de salud.
Mirta Graciela. ¡Asi es Doc! Hay que cuidarse. Cuidar a los demás. Si hay síntomas consultar y no exponer a los demás ¡Gracias! Tengo mucha fe que de esta salimos todos juntos.Cuidando y cuidándonos que es gratis y sólo se necesita un poco de esfuerzo por cumplirlo.
Mary. Gracias a todos, porque el personal de la salud ya es nuestra familia. Son momentos muy difíciles pero seguimos luchando. Dios los bendiga a todos y los proteja siempre.
Mónica.¡Gracias, gracias, gracias por todo! A cuidarse todos y cuidemos al personal de Salud. Dios y la Virgen los proteja siempre.
Gustavo. Gracias, mil gracias por estar siempre
Sonia. Triste realidad. Misericordia y piedad. Señor Jesucristo bendice a todos los médicos y enfermeras del hospital y a los de todos los centros de salud, porque todos son tus hijos. Amén.