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sábado, abril 27, 2024
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El caso Baraldo sólo espera por los alegatos y la sentencia

Caso Baraldo, día 18: Finalizó la etapa de testimonios. Declararon una perito de la defensa y el abuelo acusado de abuso sexual contra su nieto que lo denunció y el jueves 4 de octubre comenzarán los alegatos y luego vendrá la sentencia.

Se llevó a cabo una nueva jornada del juicio a los abuelos y el tío d eun niño de nuestra ciudad que los acusa de haberlo abusado d emanera reiterada durante aproximadamente tres años.
Se estima que los hechos habrían sucedido entre los 5 y los 8 años de vida de la criatura.

Ultima audiencia en los tribunales de Santa Fe
El portal Aire de Santa Fe dce que «la acusación- los fiscales y la querella- contrainterrogó a la perito de la defensa y luego declaró el último acusado, el abuelo del niño. El jueves 4 de octubre comenzarán los alegatos.
En la jornada 18 del juicio que intenta determinar la responsabilidad de tres personas en un caso de abuso infantil intrafamiliar en Esperanza, la fiscalía y la querella comenzaron con el contrainterrogatorio a la perito de la defensa que comenzó a declarar ayer.
Con una serie de preguntas que la testigo debía responder por sí o por no, se supo que la mujer no es especialista en Cámara Gesell, nunca ha realizado Cámaras Gesell ni ha entrevistado a menores.
También dijo desconocer cómo era la organización de las Cámaras Gesell en la provincia de Santa Fe cuando se dio este caso.
Luego el fiscal la interrogó sobre los profesionales intervinientes.
La testigo dijo desconocer cómo eran convocados y si tenían “animosidad” contra los imputados.
Sobre las entrevistas realizadas por las profesionales en las Cámaras Gesell que peritó la testigo, la mujer respondió que las psicólogas no le indicaron al niño lo que debía decir en la etapa de exposición libre, ni cómo debía colocar los muñecos con los que graficó la escena.
Además, reconoció desconocer los antecedentes profesionales de los entrevistadores, que declararon en el juicio y qué explicaron de las reacciones del niño.
La perito también negó que al niño le hayan indicado los gestos y las manifestaciones de ánimo que demostraba en las entrevistas.
Por último el fiscal consultó a la perito sobre el Síndrome de Alienación Parental, una teoría deslizada en el juicio por la defensa, según la cual el niño haría carne propia la versión de los padres.
La profesional explicó que no adhiere a esa teoría, que no tiene base científica y que si algún profesional se basa en esa teoría podría ser sancionado por el tribunal de ética.
Ante preguntas de la querella, la testigo reconoció que la calidad de un testimonio no puede ser medido por la cantidad de palabras. También le consultaron si los niños víctimas de abusos hacían extensos relatos de lo ocurrido, a lo que la perito manifestó que dependía según el niño.

“Triste realidad, terrible mentira”
Así comenzó su declaración el último de los imputados, el abuelo del niño esperancino.
A diferencia de lo que había sido su testimonio en el juicio anulado, donde se lo notaba adusto, retraído y con pocas palabras, en esta oportunidad se mostró eufórico, ofendido y enojado con la pareja de la denunciante, su propia hija.
Según el acusado, la denuncia fue preparada por su prima (la mujer que había alertado a la denunciante de las actitudes de su padre y que no pudo declarar en el juicio por fallecer tiempo antes  trágicamente) y la pareja de su hija. La intención: quedarse con los bienes de la familia.
Luego se refirió a la foto que motivó la denuncia, negó que haya sido una imagen tomada en su casa y negó también que haya sido él quien aparecía en esa foto.
Hizo referencia a una particularidad física que no coincidía con su cuerpo, y ofreció sacarse una foto para comparar.
Luego disparó contra su hija, y dijo que era la primera que no respetaba los derechos del niño “por exponer a mi nieto y usarlo como una careta que después se tira” metaforizó.
Y al igual que los co imputados – su mujer y su hijo-expresó preocupación por el estado actual del niño (que ellos desconocen ya que está vigente una medida de distancia) y dijo que “hace cuatro años que está en medio del desierto gritando que lo vayan a buscar”.
Por último, se encargó cargar dudas sobre la pareja de la denunciante: “es un individuo que vino de Buenos Aires y la fiscalía no averiguó nada y lo apañó”.

Sospecha de amenazas
Sobre el final de la audiencia, el fiscal solicitó copias de los registros de video de las tres cámaras por un presunto “gesto amenazante” del acusado.
Los alegatos estaban previstos que comiencen el próximo martes a las 14, pero por una imposibilidad de la defensa se vieron reprogramados para el próximo jueves 4 de octubre.